Palestina fue uno de los antiguos territorios otomanos que la Sociedad de las Naciones puso bajo administración británica en 1922. Con el tiempo, todos esos territorios se convirtieron en Estados independientes, excepto Palestina, en cuyo caso además de “la prestación de asistencia administrativa y asesoramiento” el Mandato Británico incorporó en 1917 la “Declaración de Balfour”, en la que expresaba apoyo al “establecimiento en Palestina de un hogar nacional para el pueblo judío”. Durante el Mandato, de 1922 a 1947, tuvo lugar la primera ola de inmigración judía a gran escala a este territorio, proveniente principalmente de Europa Oriental: el número de judíos que inmigraron aumentó enormemente en la década de 1930 debido a la persecución nazi. Las reivindicaciones árabes a favor de la independencia y la resistencia a la inmigración judía desembocaron en una rebelión en 1937, tras la cual ambas partes recurrieron una y otra vez al terrorismo y la violencia. El Reino Unido consideró varias opciones para facilitar la independencia a esa tierra devastada por la violencia, y en 1947 acudió a las Naciones Unidas para que resolvieran el problema de Palestina.

 
 

Tras estudiar distintas alternativas, las Naciones Unidas propusieron poner fin al Mandato y dividir Palestina en dos Estados independientes, uno árabe palestino y otro judío, y que Jerusalén quedara bajo un régimen internacional (resolución 181 (II), de 1947). Uno de los dos Estados previstos proclamó su independencia en 1948 con el nombre de Israel y en la guerra que siguió ese mismo año con los Estados árabes vecinos ocupó el 77 % del territorio que había tenido Palestina bajo el Mandato Británico, incluida la mayor parte de Jerusalén. Más de la mitad de la población árabe palestina fue expulsada o huyó del territorio del nuevo Estado. El resto del territorio asignado al Estado árabe por la resolución 181 quedó bajo el control de Jordania y Egipto. En la guerra de 1967, Israel ocupó esos territorios (la Franja de Gaza y la Ribera Occidental), incluida Jerusalén Oriental, que posteriormente anexionó. Esta guerra provocó un segundo éxodo, de aproximadamente medio millón de palestinos. En su resolución 242, el Consejo de Seguridad formuló los principios de una paz justa y duradera, que incluía la retirada israelí de los territorios ocupados durante el conflicto, una solución justa del problema de los refugiados y la terminación de todas las situaciones de beligerancia o alegaciones de su existencia. Tras las hostilidades de 1973, el Consejo de Seguridad aprobó la resolución 338, en la que, entre otras cosas, pidió que las partes interesadas iniciaran negociaciones de paz. En 1974, la Asamblea General reafirmó los derechos inalienables del pueblo palestino a la libre determinación, la independencia nacional, la soberanía y el regreso de los refugiados. Al año siguiente, la Asamblea General estableció el Comité para el Ejercicio de los Derechos Inalienables del Pueblo Palestino y otorgó a la Organización de Liberación de Palestina (OLP) la condición de observadora en la Asamblea y en las conferencias de las Naciones Unidas.

Propuesta mayoritaria de partición de Palestina

Mapa del plan de partición de Palestina con unión económica, propuesto por la mayoría de la Comisión Especial de Palestina de las Naciones Unidas. En el plan se propone la división de Palestina en tres partes: un Estado judío, un Estado árabe (en color oscuro) y la ciudad de Jerusalén (en color blanco), que quedaría bajo un régimen internacional de administración fiduciaria. 1947, Naciones Unidas (Lake Success), Nueva York. Foto ONU.

Destrucción tras la guerra en Palestina

Poblado árabe desierto, en el Néguev. 1948. Foto ONU.

Refugiados palestinos en el cruce de frontera

Un grupo de refugiados árabes de Palestina espera transporte en el Líbano. 1948. Foto ONU.

Habitantes de Oriente Medio desarraigados por el conflicto israelo-árabe

Algunos de los cientos de miles de refugiados árabes que emprendieron el cruce del puente Rey Hussein (antiguo puente Allenby) desde la ribera occidental del río Jordán, ocupada por Israel, hacia Jordania. 1967. Foto ONU.

En junio de 1982, Israel invadió el Líbano con la intención manifiesta de eliminar la OLP. Se negoció un alto el fuego. Las tropas de la OLP se retiraron de Beirut y se trasladaron a los países vecinos. A pesar de las garantías de seguridad para los refugiados de Palestina que se habían quedado, hubo una masacre a gran escala en los campamentos de Sabra y Shatila. En septiembre de 1983, la Conferencia Internacional sobre la Cuestión de Palestina adoptó los siguientes principios: la necesidad de oponerse a los asentamientos israelíes y a las iniciativas israelíes para cambiar el estatuto de Jerusalén, el derecho de todos los Estados de la región a existir dentro de fronteras reconocidas internacionalmente y el logro de los derechos legítimos e inalienables del pueblo palestino. En 1987 comenzó un alzamiento masivo contra la ocupación israelí en el Territorio Palestino Ocupado: la intifada. Los métodos utilizados por las fuerzas israelíes provocaron un número ingente de muertos y heridos entre la población palestina. En 1988, el Consejo Nacional de Palestina reunido en Argel proclamó el establecimiento del Estado de Palestina.

 

El Consejo de Seguridad exige a todas las partes que respeten el alto el fuego en el Líbano

El Consejo de Seguridad exigió que Israel retirara sus fuerzas del Líbano “inmediata e incondicionalmente” hasta las fronteras reconocidas internacionalmente. 6 de junio de 1982. Naciones Unidas, Nueva York. Foto ONU.

El Secretario General se reúne con el Presidente de la Organización de Liberación de Palestina

Javier Pérez de Cuéllar, Secretario General de las Naciones Unidas, se reúne con Yasser Arafat, Presidente de la Organización de Liberación de Palestina, en Ginebra. 27 de junio de 1988. Foto ONU.

En 1991 se celebró en Madrid una Conferencia de Paz con el objetivo de lograr una solución pacífica mediante negociaciones directas por dos vías —entre Israel y los Estados árabes por un lado y entre Israel y los palestinos por otro— sobre la base de las resoluciones del Consejo de Seguridad 242 (1967) y 338 (1973). Las negociaciones multilaterales debían centrarse en cuestiones de ámbito regional, como el medio ambiente, el control de armamentos, los refugiados, el agua y la economía. Las sucesivas negociaciones culminaron con el reconocimiento mutuo entre el Gobierno de Israel y la OLP, como representante del pueblo palestino, y la firma de la Declaración de Principios sobre las Disposiciones relacionadas con un Gobierno Autónomo Provisional (también conocido como “Acuerdo de Oslo”) en 1993, así como los acuerdos de aplicación subsiguientes, que llevaron a la retirada parcial de las fuerzas israelíes, las elecciones del Consejo Palestino y la Presidencia de la Autoridad Palestina, la liberación parcial de los detenidos palestinos y el establecimiento de una administración efectiva en las zonas palestinas autónomas. La participación de las Naciones Unidas ha sido esencial tanto para velar por la legitimidad internacional como para movilizar y prestar asistencia internacional. La Declaración de Principios de 1993 aplazó ciertas cuestiones hasta las negociaciones posteriores sobre el estatuto permanente, que tuvieron lugar en 2000 en Camp David y en 2001 en Taba, pero en las que, sin embargo, no se llegó a ninguna conclusión.

Los miembros del Consejo de Seguridad votan sobre la participación de Palestina. Los miembros del Consejo de Seguridad votan a favor de que el observador de Palestina participe en el debate del Consejo sobre la situación en el territorio palestino ocupado. 5 de octubre de 1990. Foto ONU.

La segunda intifada estalló cuando el Primer Ministro Ariel Sharon, del partido israelí Likud, visitó en 2000 Al-Haram al-Sharif (Monte del Templo), en Jerusalén. A continuación, Israel empezó a construir un muro de separación con la Ribera Occidental, ubicado principalmente dentro del Territorio Palestino Ocupado y declarado ilegal por la Corte Internacional de Justicia.

En 2002, el Consejo de Seguridad apoyó el concepto de los dos Estados: Israel y Palestina. Ese mismo año, la Liga Árabe aprobó la Iniciativa de Paz Árabe. En 2003, el Cuarteto (compuesto por los Estados Unidos, la Unión Europea, Rusia y las Naciones Unidas) dio a conocer una hoja de ruta para avanzar hacia una solución biestatal. También en 2003 se aprobó en Ginebra un acuerdo de paz no oficial entre personalidades destacadas israelíes y palestinas. En 2005, Israel retiró a sus colonos y tropas de Gaza, aunque mantuvo el control de sus fronteras, costas y espacio aéreo. Tras las elecciones legislativas palestinas de 2006, el Cuarteto puso como condición para prestar asistencia a la Autoridad Palestina que esta se comprometiera a no recurrir a la violencia, reconociera a Israel y aceptara los acuerdos previos. Cuando Hamás tomó el control de Gaza en 2007 recurriendo a las armas, Israel impuso un bloqueo.

Con el Proceso de Annapolis de 2007-2008 no se llegó a un acuerdo sobre el estatuto permanente. La escalada de los ataques aéreos y con cohetes a finales de 2008 desembocó en la operación terrestre israelí en Gaza conocida con el nombre de “Plomo Fundido”. Posteriormente, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas aprobó la resolución 1860.

Las Naciones Unidas investigaron las violaciones del derecho internacional cometidas durante el conflicto de Gaza (el “informe Goldstone”). El programa de la Autoridad Palestina de 2009 para crear instituciones del Estado recibió un amplio apoyo internacional. En 2010 fracasó una nueva ronda de negociaciones porque venció la prórroga que se había impuesto a la construcción de asentamientos israelíes. En 2011, el Presidente Mahmoud Abbas presentó la solicitud de admisión de Palestina como Miembro de las Naciones Unidas. La UNESCO admitió a Palestina como miembro.

A principios de 2012 tuvieron lugar en Amán conversaciones exploratorias entre Israel y Palestina. En noviembre de ese año estalló un nuevo ciclo de violencia entre Israel y Gaza, que concluyó con un alto el fuego negociado por Egipto. El 29 de noviembre de 2012 la Asamblea General reconoció a Palestina la condición de Estado observador no miembro en las Naciones Unidas, y en 2014 la Asamblea General proclamó 2014 Año Internacional de Solidaridad con el Pueblo Palestino. Después de que se anunció la creación de un gobierno de consenso nacional palestino, Israel suspendió en abril de 2014 la nueva ronda de negociaciones que se había iniciado en 2013. En julio y agosto de 2014 estallaron nuevos enfrentamientos entre Israel y Gaza. En 2016, el Consejo de Seguridad aprobó la resolución 2334.

Conferencia de prensa tras la reunión del Cuarteto

De izquierda a derecha: Javier Solana, Alto Representante de la Unión Europea para la Política Exterior y de Seguridad Común; Igor S. Ivanov, Ministro de Relaciones Exteriores de la Federación de Rusia; Kofi Annan, Secretario General de las Naciones Unidas; y Colin L. Powell, Secretario de Estado de los Estados Unidos de América. 26 de septiembre de 2003. Naciones Unidas, Nueva York. Foto ONU.

La Asamblea reconoce a Palestina la condición de Estado observador no miembro

Por 138 votos contra 9 y 41 abstenciones, la Asamblea General aprobó una resolución por la que otorgó a Palestina la condición de Estado observador no miembro en las Naciones Unidas. Mahmoud Abbas (centro, primera fila), Presidente de la Autoridad Palestina, con su delegación en el Salón de la Asamblea General tras la decisión de la Asamblea. 29 de noviembre de 2012. Naciones Unidas, Nueva York. Foto ONU.