Estamos en Nueva York para las negociaciones finales para un Tratado Global de los Océanos que comenzaron esta semana y se extenderán hasta el 26 de agosto en la sede central de las Naciones Unidas. 

Estas negociaciones , también conocidas como Conferencia Intergubernamental  (IGC5) para las aguas internacionales, son la quinta y última ronda de conversaciones  para finalizar un Tratado.

El resultado de la reunión determinará el destino de los océanos para las generaciones futuras. 49 países se han comprometido a entregar un Tratado ambicioso en 2022, entre ellos España. Estos compromisos ahora deben hacerse realidad.

España es un país clave dentro de esta Conferencia por ser una potencia mundial pesquera. La presión de la industria pesquera en España podría perpetuar el estado actual de gobernanza de los océanos para seguir concentrando las decisiones en las actuales organizaciones pesqueras, que tan solo se encargan de evaluar el 5% de la biodiversidad de peces de las aguas internacionales, y cuya finalidad última es la explotación comercial de la alta mar. España debe decidir en esta reunión en qué lado de la historia está, empujando a la Unión Europea hacia un liderazgo claro para lograr que la gestión de las pesquerías también sean parte del Tratado. 

Estamos ante unas negociaciones que son una oportunidad única para proteger nuestro planeta azul. Los océanos sustentan buena parte de la vida en la Tierra, pero durante mucho tiempo los hemos abandonado. Las delegaciones deben cerrar un Tratado ambicioso estas dos semanas. Un Tratado débil, o cualquier otra demora, mantendrá el statu quo tan deteriorado que ha llevado a los océanos a esta crisis”, ha declarado Pilar Marcos, de la delegación política de Greenpeace en Nueva York.

Un Tratado sólido permitiría crear vastos santuarios oceánicos, libres de actividades humanas destructivas, en aguas internacionales. Será un paso fundamental para proteger el 30% de los océanos en 2030, el objetivo 30×30, que según los científicos es el mínimo necesario para que los océanos tengan espacio para recuperarse.

¡ACCIÓN! ¡ACCIÓN ¡ACCIÓN!

Activistas de Greenpeace iluminaron el emblemático puente de Brooklyn, en Nueva York, con proyecciones que muestran la belleza y la fragilidad de los océanos. Las proyecciones muestran lo que está en juego e instan a los líderes mundiales a actuar y negociar un nuevo Tratado Mundial sobre los Océanos, que determinará el destino de los mismos. 

Aakash Naik de la campaña de Greenpeace Protege los Océanos señala: «Los gobiernos llevan casi dos décadas discutiendo este Tratado. Mientras  discuten, los océanos y las personas que dependen de ellos han sufrido. No podemos permitirnos más retrasos. Más de cinco millones de personas se han unido a nuestro llamamiento para que se cierre un Tratado ambicioso en 2022. Los negociadores deben saber que el mundo está mirando mientras deciden el futuro de nuestro planeta azul».

¿Qué se considera un Tratado Global ambicioso?

Para ser considerada un éxito, la reunión debe cerrar un Tratado que:

- Disponga como objetivo principal el establecimiento de una red mundial de Áreas Marinas Protegidas.

- Permita que los estados, a través de una Conferencia de las Partes (COP), establezcan santuarios marinos, libres de actividades destructivas como la pesca y la minería en aguas profundas.

- Posibilite que la COP tome decisiones por votación cuando no sea posible llegar a un consenso.

- Incluya que las Áreas Marinas Protegidas (AMPs) puedan ser aŕeas completamente o altamente blindadas a la actividad humana, lo que las harían más efectivas. 

- Permita que la COP decida si actividades como la pesca están permitidas o prohibidas en las AMP, sin aplazar las decisiones a los organismos ya existentes.

- Y permita que la COP adopte medidas provisionales o de urgencia para proteger inmediatamente un área que esté pendiente de su protección futura.

Informació enviada per Greenpeace a Las afueras.

Antecedents de la notícia:

https://www.lasafueras.info/mon-solidari/1430-greenpeace-proteger-al-menos-el-30-de-los-oceanos