Siento empezar la semana con esta mala noticia: Estados Unidos ha vuelto a vetar un alto el fuego en Gaza.

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Fue el pasado viernes. El Consejo de Seguridad de la ONU propuso, por segunda vez, una resolución para lograr un alto el fuego inmediato en Gaza e Israel y, por segunda vez, Estados Unidos ha vuelto a impedirlo. Es el único Estado que lo ha hecho.

Y es completamente inhumano.

Un alto el fuego en Gaza e Israel significaría poner fin a los bombardeos que están acabando con la vida de miles de personas en la Franja de Gaza. Supondría un alivio para miles de familias que lo han perdido todo, incluidos sus hogares.

También ayudaría a que todos los rehenes fueran liberados y pudieran volver con sus familias.  Un alto el fuego supondría esperanza y luz para una población devastada.

En Amnistía Internacional tenemos muy claro que el alto el fuego es imprescindible para detener el sufrimiento de la población civil.

Trabajamos sin descanso para conseguirlo: investigamos, documentamos violaciones de derechos humanos, recogemos testimonios, denunciamos, hacemos campaña y presionamos para poner fin a las atrocidades. Por dos motivos: para evitar que se repitan y para que ningún crimen de guerra quede impune.

Seguiremos haciéndolo. Contigo y con todas las personas que forman y han formado parte de Amnistía Internacional.

Gracias por seguir a nuestro lado a pesar de las dificultades. Contigo seguimos adelante.

 

Por una humanidad en la que las personas disfruten de libertad, justicia, dignidad y protección, sin sufrir violencia, discriminación o abusos de poder.

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