Para el seguimiento del Plan España Puede se han identificado diferentes elementos relacionados con la parte económica, ambiental, social y de transparencia y evaluación del plan. La información que se muestra es a tiempo real.

 

Evolución de las inversiones

La Comisión Europea aprobó en junio de 2021 el Plan España Puede por un valor de 69.500 millones de euros, de los que 27.948 millones se dedican a la transición ecológica, lo que representa más del 40% de los recursos.

Este indicador proporciona por un lado una imagen del grado de cumplimiento y del ritmo de las inversiones totales previstas en el plan cuyos ejes son: transición ecológica, digital, igualdad de género y cohesión social, y por otro el ritmo de las inversiones que se destinan específicamente a la transición ecológica.


 

Valoración de las inversiones para la transición ecológica

 

El plan aprobado no asegura una recuperación verde y justa, ya que los resultados están sujetos a un alto grado de incertidumbre, debido en parte a los aspectos que no contempla y a su dependencia de la ejecución concreta de las reformas e inversiones.

Como muestra la gráfica, las inversiones que concentran mayor grado de retroceso son las relacionadas con la agricultura y la total ausencia en el plan de la necesidad de abordar el cambio de modelo agroalimentario.

El observatorio pondrá la lupa en la ejecución de las inversiones para la transición ecológica del plan con el objeto de vigilar que no haya proyectos que dañen el medioambiente, se evite la burbuja del hidrógeno, se cambien los patrones de movilidad, las ciudades sean más amigables con las personas y el planeta, las comunidades energéticas jueguen un papel relevante en la transición energética y se transforme también el modelo agroalimentario.



Cuatro áreas formadas por:

Energía: Energías renovables, autoconsumo, comunidades de energía, almacenamiento, gestión de la demanda, eficiencia energética en la rehabilitación de edificios y el desarrollo del hidrógeno verde.

Movilidad: Uso del coche, transformación de flotas, vehículos eléctricos, infraestructura de recarga, trenes de cercanías, red de transporte transeuropea y transporte de mercancías.

Ciudades y Consumo: Creación de espacios urbanos amigables, gestión de residuos, incineración, desperdicio de la cadena alimentaria, economía circular y consumo.

Rural: Conservación de la biodiversidad, restauración de humedales, contaminación de aguas, consumo de agua de riego, apoyo a la ganadería extensiva, gestión forestal y lucha contra incendios forestales.


Otras áreas básicas del Plan España Puede analizadas para disponer del contexto y la información general antes de conocer su destino final son:

La adjudicación de las inversiones para la transición ecológica

El plan debe evitar que los fondos sean acaparados por las grandes empresas con mayor capacidad económica y tecnológica. Para ello, el Gobierno tiene que facilitar el acceso a los fondos de pymes y micropymes, empresas de economía social, sostenible y solidaria y personas autónomas cuya actividad contribuya a una recuperación verde, justa y equitativa, que corrija también el desequilibrio territorial.

Este indicador compara la proporción de las inversiones dirigidas a la transición ecológica justa y verde destinadas o gestionadas por grandes empresas frente al resto del tejido económico.

 


Empleo creado

La aportación del Plan España Puede sobre la cohesión social se articula en dos dimensiones de gran impacto: el desempleo y la desigualdad de género. Para valorar la creación de puestos de trabajo se compara el objetivo de nuevos empleos previstos con los realmente creados en cada momento.

El plan estima la creación de 800.000 empleos. Por el momento, no es posible analizar con mayor detalle esta información ya que únicamente cuatro componentes (Planes para la movilidad sostenible urbana, la movilidad sostenible segura y conectada, Modernización del sector turístico y Conectividad digital y 5G) explicitan cuantitativamente sus objetivos de empleo, que suman un total de 232.970.

Plan España Puede (2021-2023)

Empleo generado

800.000 puestos de trabajo

 

Inversiones para la igualdad de género

La igualdad de género es uno de los cuatro ejes que vertebran el Plan España Puede y está presente de manera explícita en muchos de sus componentes. Este indicador muestra una comparativa entre el objetivo de las inversiones dedicadas a favorecer la igualdad de género con las inversiones concedidas en la fase de ejecución. A pesar de ello, únicamente son tres los componentes en los que se han planificado inversiones: Modernización y digitalización del sistema educativo, Plan de choque para la economía de los cuidados y refuerzo de las políticas de igualdad e inclusión y Nuevas políticas públicas para un mercado de trabajo dinámico, resiliente e inclusivo.

Plan España Puede (2021-2023)

Inversiones para la igualdad de género

4.086 millones de euros


Por otra parte, además de las inversiones específicas previstas para reducir la brecha de género, una de las directrices transversales del Plan España Puede es precisamente la igualdad de género. Muchas de las inversiones en otros aspectos conllevan impactos positivos en este sentido, pero no han podido ser consideradas al no estar detalladas. Se realizará el seguimiento de estos impactos transversales durante el periodo de ejecución.

Participación y transparencia

En un proceso de recuperación verde y justa la participación efectiva de la sociedad civil y la transparencia son dos piezas clave.
En la fase de elaboración del plan estos dos aspectos tienen grandes déficits, por lo que deben ser mejorados en la fase de ejecución. En la siguiente tabla se irán actualizando y valorando las posibles novedades.

Plan España Puede (2021-2023) Participación y Transparencia

ValoraciónHitos
lupa verde La elaboración del plan no se ha sometido a consulta y participación pública. Urge corregir el déficit de participación y transparencia en la toma de decisiones.



Mecanismos de seguimiento y evaluación del plan

La falta de indicadores específicos en el Plan España Puede dificulta el seguimiento y evaluación de su impacto, no solo en la transición ecológica, también sobre la reducción de la brecha de género y el reequilibrio territorial.

Con este indicador se comprobará si ha habido alguna mejora en el seguimiento y la evaluación en la fase de ejecución del plan o permanecen los mecanismos deficientes de la fase de planificación. En la siguiente tabla se irán actualizando y valorando las posibles novedades.

Plan España Puede (2021-2023) Seguimiento y Evaluación

ValoraciónHitos
lupa verde

La elaboración del plan no se ha sometido a consulta y participación pública. Urge corregir el déficit de participación y transparencia en la toma de decisiones.

 

Proyectos estratégicos para la recuperación y transformación económica (PERTE)

Los PERTE son proyectos de carácter estratégico con gran capacidad de arrastre para el crecimiento económico, el empleo y la competitividad de la economía española, con un alto componente de colaboración público privada y transversales a las diferentes administraciones.

Son una nueva figura, con vocación de permanencia, concebida como un mecanismo de impulso y coordinación de proyectos muy prioritarios, especialmente complejos o en los que exista un claro fallo de mercado, externalidades importantes o una insuficiente iniciativa o capacidad de inversión por parte del sector privado. Su objetivo es contribuir a una gestión ágil y eficiente de los fondos y reforzar aquellos proyectos que contribuyan claramente a la transformación de la economía española.

El tamaño y el número de actores potencialmente implicados en los PERTE recomienda definir una gobernanza singular que permita a los distintos actores participar en la toma de decisiones con la transparencia y la rendición de cuentas que exige el sector público. Asimismo, todas las entidades interesadas deberán suscribir una serie de normas comunes para su acreditación en el nuevo Registro estatal de entidades interesadas en los PERTE.

Los PERTE son aprobados por el Consejo de Ministros a partir de criterios objetivos y transparentes.

1. PERTE Vehículo Eléctrico y Conectado

Su eje central es la creación del ecosistema necesario para el desarrollo y fabricación de vehículos eléctricos y conectados mediante el impulso a la industria del automóvil (con fuerte tracción sobre otros sectores económicos), para dar respuesta a la nueva movilidad sostenible y conectada y a la generación de nuevas actividades.

Estado > Aprobado en el Consejo de Ministros del 13 de julio de 2021
 
APROBACIÓN DEL PROYECTO ESTRATÉGICO PARA LA RECUPERACIÓN Y TRANSFORMACIÓN ECONÓMICA DEL VEHÍCULO ELÉCTRICO Y CONECTADO

El Consejo de Ministros ha aprobado el Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) del Vehículo Eléctrico y Conectado, un proyecto basado en la colaboración público-privada y centrado en el fortalecimiento de las cadenas de valor de la industria de automoción español, un sector estratégico para España. El objetivo es crear en España el ecosistema necesario para el desarrollo y fabricación de vehículos eléctricos y conectados a la red y convertir a España en el Hub Europeo de electromovilidad.

El desarrollo de este proyecto prevé una inversión total de más de 24.000 millones de euros en el periodo 2021-2023, con una contribución del sector público de 4.300 millones de euros y una inversión privada de 19.700 millones de euros.

El PERTE va dirigido a uno de los sectores estratégicos de la economía española, con un efecto tractor por su peso en el PIB nacional y el empleo directo e indirecto y su aportación a la balanza comercial. España es el segundo fabricante europeo de vehículos y el noveno a nivel mundial. Representa el 11% de la cifra de negocios del total industrial. La automoción supone el cuarto sector exportador y representa el 15% del total de las exportaciones españolas.

La creación de empleo generada por el PERTE podría alcanzar los 140.000 puestos de trabajo y la contribución al PIB se situaría entre el 1% y el 1,7%. Otros impactos esperados serían alcanzar en 2023 los 250.000 vehículos eléctricos matriculados y entre 80.000 y 110.000 puntos de recarga desplegados.

Desarrollo del PERTE

El PERTE se compondrá de dos ámbitos de actuación complementaria:

1.-Medidas transformadoras de impulso de la cadena de valor del vehículo eléctrico y conectado, enfocadas a los segmentos centrales de la cadena de valor industrial que garanticen la fabricación de estos vehículos.

2.- Medidas facilitadoras, que coadyuven tanto a la creación de una nueva

Dentro de las medidas transformadoras, se recogen las actuaciones integrales de la cadena industrial del vehículo eléctrico, un plan tecnológico de automoción sostenible, un programa de espacios de datos sectoriales y un programa para integrar la inteligencia artificial en procesos productivos.

En cuanto a medidas facilitadoras, se incluyen el Plan Moves III, el Moves singulares, la ley de Cambio Climático, la regulación de servicios de recarga de vehículos eléctricos, la hoja de ruta del 5G y su despliegue, y un plan de formación profesional.

La estructura del PERTE cuenta con bloques obligatorios como la fabricación de equipos originales y ensamblaje, la fabricación de baterías y equipos de hidrógeno, y la fabricación de otros componentes del vehículo eléctrico. Además, habrá otras actuaciones específicas que incluyan conectividad, microprocesadores, componentes del vehículo eléctrico inteligente, y fabricación de sistemas de recarga. También hay procesos transversales relacionados con la economía circular, la digitalización y la formación de trabajadores.

Para el desarrollo del PERTE y su actuación integral sobre toda la cadena de valor se debe constituir una agrupación de empresas con al menos, cinco empresas, que afecte al menos a dos comunidades autónomas (CCAA), que el 40% de las empresas sean pymes, que haya una entidad proveedora de conocimiento (I+D+i) y las empresas acrediten inversión propia y compromiso con el empleo.

El PERTE ofrece al sector y a otros operadores económicos el entorno adecuado para llevar a cabo las importantes inversiones que implica esta nueva movilidad mediante acuerdos de colaboración entre empresas de toda la cadena de valor.

Está prevista la creación de una Alianza para el Vehículo Eléctrico y Conectado para contar con la participación de todos los actores relevantes y garantizar un dialogo permanente y donde estarán representados los ministerios implicados y la mesa de automoción donde están presentes las asociaciones representativas del sector de la automoción, los sindicatos y las CCAA.